Para discutir de todo...como en botica.

viernes, septiembre 30, 2005

El fulbito

Tengo un amigo que, para hablar de asuntos eroticoafectivos, usa el término "fútbol". pregunta "¿y ahí hay fútbol?" o "Bueno, pero "usted quiere juagr fútbol ahí?". Tengo un primo que se juega tres partidos por fin de semana, siempre mete goles, suele perder, y es más bajito y más gordito que cualquiera de sus compañeros o rivales. Tengo una prima que siempre quizo ser arquera de la selección coreana de fútbol (sí, todos tenemos nuestros extraños fetiches). Tengo una exnovia con quien temrinamos proque me cansé de ver los partidos de la tercera división de Honduras con ella: no se perdía ni medio partido, cuando le daba insomnio ponía alguno de sus viejos cassettes de Betamax con goles de Gary Lineker y de Hugo Sánchez a mediados de los ochenta, y no me hablaba de nuestra relación sino de "la sociedad que tenemos que armar para liquidar la defensa rival, que marca a presión y no permite asociarse de tres cuartos de cancha para adelante". Yo ni entendí nunca si se quería casar conmigo, o si estaba simplemente aburriéndome. Pero lo logró. Total, que el fútbol me rodea aún más que los realities, pero hasta el momento he logrado gambetearlo y hacerle uno que otro golecito. Pero, para terror de quienes alguna vez me han visto con la pecosa rebotando en las espinillas, he decido dar un paso avante: voy a jugar fútbol.

Imagino que estaré sentado en la banca durante largo períodos, bostezando por la madrugada sabatina, y preguntándome por qué demonios no prefería inscribirme en esos cursos de cerámica colonial suiza del siglo XI (siempre me he preguntado dónde diablos fue que los suizos tuvieron colonias) o empezar a aprender feng-shui por correspondencia. En algún momento entraré para reemplazar a alguien que sí entiende para qué es que uno corre (bueno, o hace esa imitación de correr que yo logro) a lugares donde en un instante no hay nadie y, acto seguido, aparece un ser de viento que le pega a ese balón como si tuviera el martillo de Tor en su pierna izquierda. Y claro, me pasará eso, mis compañeros me odiarán primero para luego reírse de mí y yo vovleré a casa a medio día, físicamente devastado por haber corrido ocho metros y con el ánimo del tamaño de mi capacidad futbolística. Triste presagio. Pero ahí voy.

Si el sábado me llaman y no contesto, busquen en las clínicas: una falla cardio respiratoria o un come etílico me pueden haber mandado al otro mundo. Pero todo sea por demostrar que yo también puedo ser un tipo en calzoncillos que corre detrás de una bola, grita "quiérame, quiérame" y se siente feliz de estar mamado. Ya verán...acá estamos. Ebrios y futbolistas y demás payasadas.

martes, septiembre 27, 2005

Indeterminado

No tengo mucho tiempo estos días porque la DIAN me embargó el compu de la casa, y en la oficina me toca trabajar el triple para pagar los impuestos que no debo, así que anod jodido. Miré en messenger, y todos me habían bloqueado (complot de Don Tomate, creo yo). Traté de pensar en un tema para un post, y me dí cuenta de que tengo la mente seca. Borrada. Ando bloqueado. Así que le pregunté a un amigo, pero escogí el que más jodido me dejó: mi amigo filósofo. Y dijo, cómo no, que escribiera sobre algo sencillo y a la vez profundo, sobre algo que muestra los límites de la libertad del ser humano, sobre algo que a todos nos concierne pero que dejamos pasar por el fondo profundo de nuestra vida. Que escribiera sobre lo indeterminado.

En realidad, creo que esta era una incitación a que se estallara mi cerebro de una vez por todas, mientras me ponía a darle infinitas vueltas a si se puede escribir sobre lo indeterminado, sobre si se le puede pensar siquiera... así que me niego. Ni siquiera sé de qué estoy escribiendo (y supongo que mi amigo ganó entonces, porque esto es totalmente al azar y si no es sobre lo indeterminado es un ejemplo de lo indeterminado...etc., etc.) ni a qué punto quiero llegar.

Mejor dicho, mejor me cayo. Esto estría mejor en el blog de Don Toamte, aunque acá creo ser mucho más incoherente que él, y sin haberme tomado ni un trago. Creo que una palabra, "azabache", me tiene medio pendejo. A buen entendedor...

jueves, septiembre 22, 2005

Todo llega al sexo

Todos surgimos de una relación sexual, claro está. Lo que yo no me había enterado es que este blog o, más bien, su nombre, también. Claro que una relartivamente moderna, de tiempos del SIDA: una botica para comprar preservativos, y los preservativos. O si no, miren esta noticia. Pucha, es que la prima gringa sí que nos hizo famosos...

miércoles, septiembre 21, 2005

Reacciones incomprensibles

Este blog no quiere llegar a ninguna parte, ni tener más reconocimiento que muchas sonrisas y alguna que otra carcajada (bueno, si alguien gusta de él e invita a una cerveza, no me enojo). Así que nada, yo me siento frente al compu en un rato muerto, abro esta vaina, y escribo lo primero que se me viene a la cabeza. Lleno de errores de mecanografía según he notado - pero me da mamera corregirlos. En fin.

El punto es que ayer me enteré de algo que no me esperaba, y que espero ustedes me ayuden a analizar. Resulta que uno de mis primeros lectores y colegas bloggeros, Diego, comentó que su hermano tiene un blog en el que aparte de escribir dos posts pésimos y uno bueno, a mi juicio, se la pasa dándome por la cabeza. ¿Mamadera de gallo? ¿Amor incontrolable? ¿Ciberodio? No sé, y me tiene entre el fastidio y la admiración.

Bueno, he de ser sincero. Mi vida es un largo aburrimiento, como sabrán Aljuri, Don Tomate, el Dr. Barbarie o el Juglar, así que este pequeño episodio me da mucho en qué pensar, y es una manera de sentirme importante para alguien (sníf, sníf). Y pues como no pasa nada y no tengo nada que contar, es el único evento que les puedo participar, y en el que sé que me pueden ayudar. Malidta sea, y todos esos otros blogs llenos de fiestas, de paseos, de encuentros, de amores imposibles...pero ni los miren, son mamones. El único bueno es éste (y algunos de los que les recomiendo, claro).

Bueno, volvamos al punto. Métanse al blog aquel, y miren que en cada post hay un insulto contra Lewinski, y que cada uno es más fuerte que el anterior. Yo, por ahora, propongo que todos se metan, comenten con mucha delicadeza y cariño su blog, y lo bloqueen del messenger - ya sabemos que ésa es la cibermuerte. O algo así.

P.D. Pericles fue el que dio en el clavo: los posts anteriores eran una columna de Fernando Londoño Hoyos en El Tiempo. Lindo él.

P.D. 2: ¿¿¿Cómo )(/&()=%·@ nadie más le pegó al perro???

P.D. 3: Ya este nuevo post es menos localista, para los amigos no colombianos que se quejaron.

P.D. 4: Novedades informáticas. para los que siguen con los pinches 2 MB de hotmail, en este lugar están las instrucciones para tener una capacidad más grande. Que les aproveche.

jueves, septiembre 15, 2005

Dios los crea... (2)

Para muchos, no pasaba Turbay de un político astuto, de generosa memoria, bueno para alcalde de provincia (bueh, se le nota su mano en la metrópoli que es Girardot. Justo para cuando fue alcalde esa ciudad perdió su condición de puerto de Bogotá sobre le Magdalena, pero bueno, ahí esta El Peñon)y para secundario diputado departamental. Y tenían razón (Y la siguen teniendo). Pero ese era el hombre de aquella hora, que a la siguiente no aspiraba sin justicia a ser un buen congresista (Doble negación, que siempre me jode...¿al fin qué? ¿Su aspiración era justa?). Y cuando quería ser de los jefes del Partido Liberal, para sorpresa indignada de quienes lo habían medido no mucho atrás, probaba que también exhibía títulos para esa nueva conquista(En suma, el viejo era un perro). Y llevaba, además, la invencible ventaja de conservar el secreto de cómo llegar a una Asamblea (Lo dicho: era un politiquero de miedo ¿o cómo creen que funcionaba eso hace 50 años?).

Se dijo de Turbay Ayala que fue nombrado Ministro de Minas y Petróleos por error de una secretaria (a esta mujer hay que encontrarla y decapitarla. la de males que le debemos...), que confundió su nombre con el de otro de su apellido (Pero ¿acaso hay tantos Turbayes en Colombia? Se nota que le tocó durito, al Julio César), solo que conocedor a fondo de aquel extraño mundo de la riqueza subterránea. Para su gloria, quisiera cierta la especie del error (este lenguaje barroco me empieza a desesperar). Porque de Minas y Petróleos aprendió lo suficiente para conseguir luego, cuando fue Presidente de la República (¿Cómo, de presidente no tenía ministro de minas?), solo estas tres cosas: una política petrolera, que permitió firmar los contratos de explotación de Caño Limón, Cusiana y Cupiagua (de esto no sé, pero sospecho); darle vida formal a Carbocol (que ya fue vendida), y llevar al terreno complejo de la realidad la vieja ilusión de Cerromatoso (todavía más vendido, en este "terreno complejo de la realdiad"). Como quien dice, que hoy vivimos del petróleo, del carbón y del níquel inventados por un Presidente que aprendió del asunto cuando llegó al Ministerio por equivocación mecanográfica (ah, yo no sabía que Turbay fue "arquitecto" del destino minero de Colombia. Pero ¡qué gran homre, si incluso nos regaló el petróleo!).

Lo recordarán la Historia (pucha, con H mayúsucula y todo, debe ser que sólo hay una historia y tiene vida propia) y la memoria agradecida de los colombianos (me empiezo a sentir poco colombiano, como me suele pasar últimamente), como el hombre que supo derrotar a la guerrilla (sin duda, el apunta más fino, de mayor sentido del humor y realmente mordaz), con el coraje de un titán (¿los titanes eran corajudos? ¿Tuirbay era valiente?), la sagacidad de un político de pasmoso tino (Sagaz, sagaz, lo que se dice sagaz, no lo creo) y la finura moral de un gran jurista (¿Será que el autor es jurista, y bien inmoral?). El Estatuto de Seguridad ha traído al anca la leyenda negra que suele acompañar las grandes gestas (Dicen que la mayor gesta de la historia de Colombia fue el cruce de los Andes por el "Ejército Libertado", y no le conozco leyenda negra...). Pasados veinticinco años de su vigencia, siguen pendientes las pruebas que prometieron los pregoneros de la mentida infamia (Bueno, los que sobrevivieron, no? Igual miren el blog de Don Tomate...).

Por esa obra cumbre de su Gobierno (bonita, esa gran obra), Turbay venía siendo admitido en los anales de la Historia (esta vieja recuerda y tiene anales. Con razón a veces le hacían estatuas) como un hombre muy rudo (¿rudo y de corbatín?), de rigores extremos y desafiantes (bueno, el corbatín sí es extremo, y desafía la estética), incapaz de la obra serena y sutil de un gran político, pero al fin y al cabo útil en la encrucijada donde el destino se encontró con su ambición (lindo, eso. Un encuentro del destino con la ambición. pero no entiendo un carajo). Nuevo error (¿Turbay nunca dejará de sorprendernos?. Ese Turbay (¿era el primo?), que no era otro que el que desafió entera a Latinoamérica en el caso de las Malvinas(claro, que man más rudo: se alió con el Reino unido y con los Estados Unidos contra Argentina...), pero al que le sobró corazón y paciencia para admitir su derrota en la Embajada de la República Dominicana (No entiendo: ¿perdió ahí pero derrotó a la guerrilla? ¿Cuándo, cuando le robaron los fusiles del Cantón Norte?), tenía nuevas sorpresas para sacar de la mágica caja de su capacidad de transformarse (Todo un camaleón. ¿No les suena a nuestro presidente-candidato?). Cuando tuvo que llorar, con el corazón partido en mil pedazos ante el cuerpo inerte de su hija adorada (y ahí "tuvo que llorar". Definitvamente era rudo), sacrificada porque era su hija, dio una lección de entereza, de valor cristiano, de grandeza moral, que nos llevó al aprendizaje de que la compasión es aún más grande que toda la violencia que pueda caber en el corazón de los malvados (A mi me late que el man ya se había pillado que la vaina con la guerrilla era un poquito más complicada que torturar a un poco de izquierdosos en las caballerizas. Y que la cuestión del narcotráfico algo tenía que ver con todo esto. Pero no sé, a lo mejor si era un dechado de virtudes y un gran imbécil).

Y lo mejor estaba por llegar (Excelente! Esta biografía no tiene pierde). En estos días que pasaron, en la cumbre ya cercana de sus noventa jóvenes años (bonita paradoja, altamente lírica), apoyando la reelección del presidente Uribe, Turbay Ayala enseñó grandeza de espíritu(¿por no haberse metido en el camino de Uribe, proponiendo su propia reelección?), visión de profeta (esto sí que no lo entiendo ¿Acaso qué dijo del futuro? ¿"reelección o catástrofe"?), talento de conductor (conductor de mula, sería) y su eterna vocación de líder. ¿Algo más le faltaba a su grandeza?"

Lindo, no? Y esa pregunta final, que nos lleva a mirar al horizonte infinito, y a suspirar, una vez más, por una Colombia en paz, con Uribe perpetuamente reelecto y Telmex dueño de nuestros teléfonos.

Dios los crea...

Como ya les dije, no estoy de ánimos para HM. De hecho, con el trabajo, el grado del sábado y el apartamento, ando un poco volado. Pero hoy les traigo un columnista invitado, un señor que sí que sabe HM y embelesar gente, pero lo suele hacer en un tono muy serio, como si sus escritos no fueran, en el fondo, una gran carcajada sarcástica respecto a nuestra sociedad. Así que su artículo va a estar salpicado de comentarios explicativos, de notas de esas mamonas de libros ladrilludos. Eso sí, no les digo quién es el autor: ustedes tienen que descubrirlo.

A título de introducción, les cuento que esta columna está dedica al nunca suficientemente bien ponderado Julio César Turbay Ayala. Qué ironía la mía, no? Que humor tan fino...bueno, pero ahí les traigo la echada de mierda más brutal y el humor más elegante que jamás encontrarán en este o cualquiero otro lugar. Ah, y como está alrgo, les va en dos entregas.

"Julio César Turbay Ayala (15 de septiembre de 2005)
Lo recordará la historia como el hombre que supo derrotar a la guerrilla. (¡Mierda! Yo no tenía ni idea que la guerrilla había sido derrotada, y hace más de viente años...)

“El hombre que no conoce las asperezas del rigor tampoco puede llegar a conocer las dulzuras de la compasión”. (Carlyle) (Linda cita. Muy culto, el hombre, pa' qué)
Ha cesado la militancia (¿Turbay militó? Pero si se acababa de salir del Partido Liberal para crear el esperpento ese de Patria Nueva) de uno de los colombianos más imponentes de los últimos años (Nah, los más imponentes son Juanes y Shakira. Bueno, y Juanpis, que corre mucho). Esculpido a cincel por su propia voluntad (bueno, es que si a mi me agrarran a cincel sin que yo lo quiera, se me vuela la piedra), de homéricos perfiles (¿alguien conoce el perfil de homero? ¿O será que está habalndo del bárbaro de Aquiles, que mató a Héctor y luego se puso a darle vueltas a Troya con el cadáver colgando de su carro? Debe ser, me suena más a Turbay), sin más patrocinio que el de sus propias condiciones (Bueno, es de haber sido familiar de un candidato liberal debe haber ayudado, no?), Turbay Ayala no paró nunca de enriquecer su patrimonio espiritual (yo lo conocí cuando ya era viejito y no se de espíritu, pero de mente...en fin. Si ése era su patrimonio al final ¿se lo imaginan al comienzo?). Fue el suyo el más sorprendente ejemplo de quien asume la tarea de ser, como dijera el poeta (¿qué poeta? Yo no sé, yo conozco más de uno), el arquitecto de su propio destino (hombre, no entiendo: o cada quien arma su vida, y entonces no hay destino, o estamos destinados, y entonces nadie puede construirlo. ¿Querrá convertir a Turbay en una deidad?). En cada estadio de su vida (El Campín, el Atanasio, el Pascual...el Olímpico de Roma, me imagino, cuando estuvo de vaticando de embajador en el Vaticano), aparecía con caracteres nuevos, estilos mejores, más dilatados y aquilatados pensamientos (dilatados, sin duda, porque hablaba a unas velocidad que realmente hacía difícil no quedarse dormido). Hizo de la vida, que nunca, y menos en sus comienzos, le fue fácil (lo nombraron a dedo, a los 21 años, alcalde de Girardot. Vida tan jodida la del hombre), una escuela de noble aprendizaje y una tarea interminable de perfeccionamiento íntimo (en efecto, le faltó bastantico)."

martes, septiembre 13, 2005

Un descanso de HM

No sé si es porque tengo una extraña gripa, si se trata del cumplimiento de la promesa de "habalr de todo como en botica" o de una de esas sequías mentales, pero hoy no les traigo nada gracioso. O, por lo menos, mi intención no es que sea chistoso, porque aunque sigo con ánimos de reír, les traigo dos temas mcuho más serios. Lamento y comprendo que algunos puedan aburrirse o desilusionarse, pero este es mi blog, así me siento hoy, qué le vamos a hacer.

Por un lado, un tema que me toca de forma casi directa y que es un elemento más que me hace dudar de la seriedad del periodismo en este país. Se trata de la situación de los curadores urbanos en Bogotá, y particularmente del Curador Número 4, Germán Ruiz. Quienes lean la prensa (y, claro, por prensa debe entenderse El Tiempo...) sabrán de qué les hablo: los problemas eternos de los moteles, un debate con Alvaro Valencia Tovar (exgeneral, excomandante de las Fuerzas Armadas, en fin, que ataca una licencia para construir unas torres en la 106 abajo de la séptima, frente al Cantón Norte), investigaciones de la personería Distrital. Lo que nunca se han tomado el trabajo de explicar es qué carajos hace un curador urbano, qué libertades y límites tiene para cumplir sus funciones, quién debe investigar las construcciones, etc. No les pongo links de El Tiempo porque serían demasiados y basta con hacerle seguimiento una semana a la sección de Bogotá para ver alguna noticia al respecto (o escuchar La W...). Sencillamente les cuento cómo es la cuestión institucional, a grandes rasgos. Hasta mediados de los años noventa una oficina pública era la que otorgaba las licencias de construcción, pero eso era un despelote y una corrupción terribles. Por eso el Estado decidió que, en las grandes ciudades, eso se le iba a otorgar a unos particulares llamados curadores que, como los notarios, le pagan a sus empleados, se consiguen el lugar para trabajar, etc., y se quedan con los ingresos (que, según tengo entendido, no son nada despreciables, aunque eso depende del servicio y la orgnaización interna de cada curaduría). Pues bien, hoy en día los curadores revisan planos, miran lo que se puede hacer en cada lote según las normas del Plan de Ordenamiento territorial (POT) y su desarrollo, aún no terminado, en Unidades de Planeación Zonal (UPZ), y dan autorizaciones ("licencias") para determinado tipo de construcción. Eso es lo que vemos en las vallas de las obras. Luego es función de los Alcaldes Locales, en Bogotá, mirar a ver si los propietarios sí están construyendo de acuerdo con la licencia que les otorgó el curador. Y resulta que dicen que van a ahcer un hotel pero resulta siendo un motel, pero si el curador les niega la licencia por sospechar eso, pues le mandan una investigación porque no se le puede negar un derecho a una persona por sismples sospechas. En fin, el tema es laaaargo y por ahora me detengo, pero les dejo la dudita ahí.


El segundo punto es más corto. Una amiga, redura de las ciencias sociales y estudiante en Europa y que tal, se vino a hacer trabajo de campo en un barrio de Usme. Tras andar por allá unas buenas semanas, descendió de los cerros con muchas cosas en la cabeza, y decidió poner una en práctica: ayudar a una familia a montar un tallercito de calzado. No les echo más el cuento, pero si alguien está realmente interesado en ayudar, porfa pongan un comentario con su correo y les envío la información completa. Ah! y no se preocupen, que la idea es aportar capital de trabajo (platica, billete, billulo, lana, "movimiento de frotar, en pequeños círculos, las yemas de los dedos índice y pulgar", móni) hasta llegar como a 1.3 millones (paquetes, palos) de pesos. Bueno, se esperan interesados - el monto no importa, porque ahí se va sumando. Si es en dólares o euros, que bonito.

P.D. prometo un post del estilo HM próximamente, pero estoy a la espera de más comentarios al anterior, y de medir la recepción de este post.

P.D. 2 ¡háganle, ayuden! En serio es por una buena causa

P.D. 3. Para quienes me conocen, me trasteo esta semana. Ojo que habrá shower(s), porque no tenemos ni cortinas.

viernes, septiembre 09, 2005

Los lugares de las fiestas

En vista de la acogida que tuvo el asunto de las fietas caseras, decidí continuar con el tema. Sin embargo, la cantidad de comentarios sobre los diferentes tipos de asistentes (los colados, lo borrachos, los abstemios, los bailarines... léanse los del post anterior si no saben de qué les hablo) me lleva a pensar que o el tema es infinito, como cualquier tema de HM que se respete, o ya los aportes lo agotaron, y entonces ni pa' que escribo. Pues escribo porque me da la regalada, pero vot a tratar de no repetirme sin cambiar de tema. Pucha! Que bollo el que estoy armando, así que entremos en materia:

Las fiestas en las casas tiene una concurrencia variopinta, sin duda. Pero también es fundamental, para entenderlas como es debido, analizar los diferentes lugares en los que "ocurre" el ágape, pues, como el famoso juego de mesa, uno no sólo tiene que saber quién es el asesino sino dónde ocurrió el homicidio - el siguiente post será, quizás, el del arma. Hay varios lugares claves.

1 - La sala, o salacomedor. Este es el lugar de la fiesta por antonomasia, pues generalmente allí es donde está ese eje central que es el equipo de sonido, además de los maternales pasabocas y el infaltable trago (bueno, y el clai pa' los abstemios... que después no digan que nos los menciono). En los primeros momentos es donde se concentra la gente, pero luego se vuelve el reugio de borrachos dormidos en los sofás, parejas de bailarines (nada de hombres del interior, según me informan) y pinchadiscos fracasados. En suma, pasa de ser el epicentro, allí donde los primeros en llegar charlan tímidamente o buscan a la víctima de la noche, a ser algo así como el lugar de quienes apenas tienen un lugar.

2 - El corredor de entrada. Simple lugar de paso en fiestas poco concurridas, puede resultar, unas horas y unos tragos más tarde, el lugar óptimo para el beso furtivo, el echada de perros, la confesión de borrachos o la pelea de celos. Por lo general nadie quiere estar ahí más de un rato, así que todas estas cuestiones medio secretas se desarrollan en la complicidad de la penmubra y el frío.

3 - La cocina. Como todos sabemos, fuesta que se respete termina ahí. Inicialmente es parte de las zonas vedadas a los invitados, pero su estratégica ubicación en términos de alcohol y pasabocas hace que pronto el dueño de casa pierda el control sobre esta zona clave. Unas tres horas y media después de iniciada la fiesta, el dueño entrará para encontrar ahí a una pareja que desea desaparecer de las miradas ajenas, a un borracho abriendo y cerrando cajones en busca de trago, a dos colados hambrientos que se están comiendo los enlatados vencidos y a un corrillo de amigas que están rajando de los manes que les han tratado de caer y de los borrachos de babas escrurridas.

4 - El baño. Punto clave de la fiesta. Es un lugar por el que luchan los bebedores de cerveza, los borrachos con náuseas y las parejitas casuales - bueno, y si hay cierto tipo de personajes, los que aspiran. Suele ser un punto muy debatido y bastante poco útil para quienes desean conservar sus secretos, pues siempre (óigase bien, SIEMPRE) hay alguien esperando su turno.

5 - El cuarto principal. Esta habitación es la reina de las fiestas, es el lugar en el que buena parte de los muchachos desean terminar, y en el que una proporción similar de las mujeres temen despertar. Claro, si hay padres en casa esto no deja de ser un deseo eventual, pero ante su ausencia temporal o permanente, la meta se hace realizable. Por lo general terminan allí la niña insaciable con el borracho de turno, la pareja de mejores amigos que nunca habían aceptado otras pasiones, el playboy odiado por todos con la niña más bonita de la fiesta, o el dueño de casa con otros cuatro borrachos (tres amigos y un desconocido absoluto, que se quedará al otro día comiendo y jugando ninetendo hasta las ocho de la noche).

6 - El cuarto del anfitrión, si no es el anterior. Este lugar guarda muchos tesoros: diarios secretos para los enamorados chismosos, discos para los manilargos, libros de poesía para los enamoradores poco ocurrentes, fotos de exnovios para los rencorosos y, cómo no, una cama. Sus usos son múltiples pero, en general, el dueño de casa ODIA encontrar a alguien allí, por cualquiera de los motivos que se puedan dar.

P.D. Mil gracias a Pili por su comentario, que inspiró este post

P.D. 1 No se olviden de usar el shotubox de al lado, a ver si de verdad pasaron "a saludar". Es de fácil manejo...

P.D. 2 Comenten, comenten que es agradable

P.D. 3 Sofía, espero que esta vez entiendas un poco más, y que dejes tu saludo

martes, septiembre 06, 2005

Sigamos HM - las fiestas caseras

Para que vean que la basura que hablo es basura pero no tanta, por ahí me mandaron una columna de El Espectador de Armando Montenegro en la que comenta un libro dedicado a hablar de hablar mierda (HM). Léanla para que opinen, y entiendan por qué yo sigo hablando basura, así algunos se resientan con tal calificativo (y eso que soy lo más de decente, y no HM).

Pero como para HM hay que poner un tema que oscile entre lo ridículo, lo por todos conocido y lo no técnico, un post postque leí la semana pasada (y que fusilo parcialmente) y una serie de acontecimientos del fin de semana mi hicieron recordar que todos, en uno u otro momento, hemos vivido las fiestas caseras y los eventos típicos. Para mí, las fiestas en casa suelen ser momentos memorables, sobre todo cuando tienen (y siempre tienen), más de tres de los siguientes personajes. Ah, y para los que me conocen, antes de que sigan leyendo, nada de comentarios recordándome cuándo fui alguno de ellos...

1 - El borracho llevado. Claro, en las fiestas siempre hay varios que toman de más, pero entre esa masa amorfa siempre hay uno que logra ser aún más amorfo, hasta cuando vomita el piso del baño (y luego alguien se cae sobre el vómito...) o el sofá de la sala. Este personaje, que en ocasiones gusta de mantener este rol, e incluso se precia de ello, parecería ser prescindible. Sin embargo, el punto X demostrará su razón de ser.

2 - La pareja de la noche. Una amiga del primo de la amiga del jardín infantil del dueño de casa llega a la fiesta víctima del desparche, y conoce al amigo del amigo del exnovio de la hermanita del compañero mamón del dueño de la casa. Hay un amor a primera vista (bueno, esta situación se puede calificar de muchas otras formas, peo seamos benévolos) y a la una y media de la mañana alguien le dice al dueño de casa que está que se hace pipí y la pareja lleva 45 minutos en el baño, o la prima del dueño le cuenta que el cuarto del servicio está ocupado...

3 - Los novios en problemas. La pareja que lleva cuatro años y medio, y de quienes se rumoran varias fechas para el matricidio, entra en crisis. Mientras ella entraba a la cocina por un vasito de agua, él empieza a charlar con la niña que siempre le ha encantado y luego la saca a bailar. La escena de celos que sique es verdaderamente apoteósica, y logra detener la rumba por una media hora, cuando no matarla de forma definitiva.

4 - Los discjockeys de media noche. En general se trata de niñas que están "super prendas" y, ya a mitad de la rumba, deciden que ellas sí saben cuáles son las canciones que van a prender la fiesta. Conclusión: ningun tema sobrepasa los cuarentaycinco segundos de duración ni logra llegar al final de la primera estrofa. Este es uno de los especímenes más peligrosos para la rumba.

5 - Los amigos inseparables. Llegan jusntos a la fiesta, hablan de fútbol o de política (de manera más general, HM), toman ron sin cesar, y salen abrazados y borrachos. Alguien se pregunta si se les moja la canoa, y aunque hay sospechas, no se puede afirmar nada.

6 - El levantón frustrado. Llega tarde para sentirse importante, con la quinta pinta que se puso para ver cuál le coultaba mejor los defectillos. Apenas entra busca una posible víctima, y halla cuatro. A lo largo de la noche se dedica a emborracharlas a todas, a hablarles de la luna y las estrellas y a tratar de converncerlas de sus dudosas dotes de bailarín. Llega a la casa tarde, aburrido y con cuatro teléfonos en un papel, que de entrada y por experiencia ya sabe que son falsos.

7 - El alma caritativa. Esta es la amiga de la prima que siempre estuvo tragada del dueño de la fiesta pero nunca se lo confesó. Como ve al pobre hombre estresado, decide que ahí puede ganar puntos, y lo ayuda a limpiar el vómito, a sacar a la pareja del baño, a pedir trago a las dos de la mañana, a servirle un alkaseltzer al borracho, a reemplazar a las disckjockeys, a charlarle al borracho verborreico...y al final, recibe una sonrisa como premio.

Obviamente quedan en el tintero más ejemplares de esta fauna, pero el post ya está largo. Más bien comenten y hagan sus aportes...

viernes, septiembre 02, 2005

"Quiero basura, amo basura, mejor me como un gusanito"

tener un blog me gusta, pa'qué. Es divertido, me dá más sexapil /sexappeal/ (¡vaya! este término ya no está en boga ni en wikipedia...voy a hacer el oso) y, sobre todo, me ha permitido malgastar mi tiempo de manera aún más grata y leer a grandes pendejos, como don tomate, ricardocabezas o el ingeniero diego. Qué maravilla.

Y, claro, por alguna extraña razón mis primeros posts fueron todos sobre el messenger (¿será porque me la paso ahí metido? Entre otras, hoy es viernes por la tarde y hay muy baja afluencia. Malditos vagos que se van de rumba...y yo acá), pero he ido ampliando la cabeza, sobre todo después de esa malhadada carta de la DIAN. Pero lo que hoy me tiene sorprendido, en medio de este sopor de viernes a las 3 p.m., es la cantidad de basura que hablo yo, y que hablan los demás. Se habla basura de las vestimentas de las mujeres de la casa real de Inglaterra (un amigo quería que yo hicera un post al respecto... ahora ya entiendo por qué el idiota ese se va a casar. Debe estar más aburrido que niñera en arenera, y hasta más aburrido que yo), de los carrerones de Juanpis en la primera fórmula, del nuevo logo de la nueva campaña del nuevo país que es el mismo viejo país cada día más godo posmoderno(miren acá), de los calzoncillos y su necesaria desaparición (y el debate estaba bueno). De todo, como en botica.

Y resulta que a mí me gusta. Sí, me gusta hablar basura, o paja, o mierda, o echar carreta o lavadero, o hablar mucho y no decir nada, o hacerme el pendejo, o pasarla rico oyendo sonidos no tan musicales (que ya me derion palo por lo otro, pero les cuento que volví a oír la cancioncilla aquella de mi rpimo pero con daza simultánea y me gustó muchísimo: definitivamente lo que ocurre es que no tengo eso que llaman imaginación). Así que no sólo me encanta habalr basura, sino que también me gusta escribir basura. A lo mejor eso signfica que soy una basura, pero ya cierta amiga me tiene bien bajita la autoestima ("mejor me como un gusanito") y prefiero dejar el psicoanálisis por acá. Porque lo cierto es que sus mercedes, queridos y necesarios lectores, también gustan de leer basura - no en vano leen esta botica, o se hacen las que la leen, o la devoran tres veces al día, o me aprecian y se pasan por acá para no sentirse mal conmigo. O, incluso, querrían tener una botica y vienen y comentan. Leen basura. Escriben basuras. Así, pues, quizás todos somos basuras.

De ahí a empezar a hablar pestes del ser humano y decir como Diógenes "entre más conozco a los hombres más quiero a mi perro" y luego notar que ese tipo era un optimista, pues no hay sino un paso. Pero qué va. Más bien vámonos a hablar basura todo el fin de semana - bueno, si la quieren dejar por escrito, espero con ansiedad sus comentarios de basura.

Nos vemos, basuras!

P.D. Por si acaso, esto nació en un insulto de un amigo, Frías. Gracias a él.

P.D. 2: Creo que el messenger me gusta porque es una ventana siempre abierta a la basura.

P.D. 3: La próxima podremos hablar de los chatrooms, y de los ciberlevantes a punta de hablar basura.

P.D. 4: Me encantaría que los amigos que están afuera, los que están lejos, dejen un comentario, así sólo sea para saludar, y así sea en un idioma incimprensible. Sé que todos entienden español...y sé que han leído esto en Holanda, en Grecia, en Portugal...

P.D. 5: Creo que me encanta posdatiar. No sé por qué. Será porque no quiero dejar de escribir basura, y porque inisito en conocer a lordinario.